Quizás pocas cosas en el mundo puedan aproximarse tan bien al concepto de “cultura” como el té, ya que ambos nacen del cultivo de la tierra y culminan en el cultivo del espíritu.
Su historia ancestral, sus mitos y leyendas, y la diversidad de personas y naciones que lo han cultivado y consumido en todo el mundo y por miles de años imprimiéndole su encanto son solo algunos de los elementos que siempre tendremos para experimentar y conocer acerca del té.
El buen té es un fruto de la tierra, se cultiva con mucho conocimiento y amor para que, al llegar a nosotros, nos adentremos en él y podamos disfrutarlo y compartirlo con personas y momentos que enriquezcan nuestra alma y cultiven nuestro espíritu.
¿Cómo, cuándo y dónde se descubrió el té?
El té es milenario, tiene origen en China, donde se lo conoce y disfruta hace miles de años.
Originariamente se lo valoró por su efecto de bienestar corporal y mental provocado por la cafeína y los taninos. Luego fue apreciado por sus propiedades medicinales, y más tarde como un elemento de lujo y distinción.
La versión china del origen del té:
Hay muchos mitos y leyendas en torno al descubrimiento del té, pero cuenta una de esas leyendas, que el té fue descubierto por el emperador chino Sheng-Nung, llamado "el labrador divino", hacia el año 2750 a.C.
Cuando Sheng-Nung estaba descansando debajo de un árbol, le acercan un cuenco de agua caliente para saciar su sed, una suave brisa acarició las hojas de un árbol de té, y esto hizo que caigan dentro del cuenco del emperador, quién bebió el brebaje sintiéndose refrescado y con el cuerpo relajado, a la vez que su mente se vio alejada de todos sus tormentos.
Así descubrió Shen-Nung el encanto de ésta bebida y a partir de ahí alentó al pueblo chino a cultivar la planta y a preparar la infusión como su bebida cotidiana.
Shen-Nung afirmó: “El té apaga la sed, reduce las ganas de dormir, alegra y aviva el corazón”.
Si querés saber más sobre el maravilloso mundo del Té, te invito a seguirnos en Instagram y formar parte de la Comunidad Ananya.